LA PRESENCIA DEL ESPIRITU SANTO

Entendiendo el “mover” de Dios

Ritchie Pugliese

En la Biblia se describen cuatro niveles de la Presencia de Dios, los cuales considero importante detallar:

1. La Omnipresencia de Dios, la cual significa que Dios está en todos lados (Salmos 139).  No importa dónde vayamos, Dios siempre está allí presente.  A pesar de que no lo sintamos Su Palabra nos enseña que él siempre está allí y dispuesto a oír nuestro clamor.

2. La presencia interior de Dios, es la que reside dentro de nuestro ser, a partir del momento que recibimos a Cristo como nuestro Salvador personal (Romanos 8:15-16).  El Señor está en todos lados pero vive dentro de nuestro ser.

3. La presencia manifiesta de Dios (Su Gloria, del hebreo “kavod” =algo muy pesado. Éxodo 33:15), es cuando Dios se revela de tal manera que podemos sentirlo y percibirlo con nuestros sentidos.
Algunas veces podemos oír su voz, otras veces podemos ver una nube visible de luz.  Otras veces simplemente sabemos que Dios está presente con uno de una manera muy personal.
Cuando Dios manifiesta Su presencia de manera tangible, decimos que estamos experimentando Su gloria.  Esto puede ser cuando estamos orando o cuando estamos adorando a Dios en la sala de la casa o en el auto.
Otras veces puede suceder cuando estamos adorando al Señor en una reunión general de la iglesia.  Sabemos que Dios está presente, por lo cual muchos son tocados y reciben salvación, sanidad, liberación y gozo inefable.

4. La morada continua de la presencia de Dios, es cuando el Espíritu Santo se posa o habita continuamente en algún lugar determinado o específico.  Llamamos a esto la Gloria Shekinah (la palabra “shekinah” viene de la palabra hebrea “shakan” que significa “habitación o morada” (2 Crónicas 6:30,33, 39; Isaías 18:14)