¿Por qué no puedo cambiar?
¿Alguna vez has
prometido abandonar un mal hábito, para caer de nuevo al poco tiempo en el
mismo? La derrota te deja preguntándote: ¿Qué pasa conmigo? ¿Por qué no
puedo vencer esto?
Convertirnos en las personas que Dios quiso que fuéramos al
crearnos, es un proceso de adentro hacia fuera. Ya que nuestros pensamientos
gobiernan nuestras emociones, decisiones, acciones, actitudes y palabras,
cualquier transformación duradera debe comenzar con la mente.
Por eso Pablo nos dice: "No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la
renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios,
buena, agradable y perfecta". Romanos 12:2 (NVI)
Esta no es una
transformación repentina, sino un proceso que dura toda la vida. Somos un
reflejo de todo lo que hemos estado pensando durante años. La buena noticia es
que, no importa cuáles hayan sido tus pensamientos en el pasado, Dios puede
enseñarte a pensar de manera diferente. Él te da su Espíritu para guiarte
mediante un proceso que produce una restauración real y un cambio permanente.
Santiago 1:14,15 dice: "Cada uno es tentado cuando sus
propios malos deseos lo arrastran y seducen. Luego, cuando el deseo ha
concebido, engendra el pecado; y el
pecado, una vez que ha sido consumado, da a luz la muerte." (NVI)
Por eso, debemos tener discernimiento en cuanto a lo que
vemos y escuchamos. Es también la razón por la que el apóstol Pablo nos dice:
"Con respecto a la vida que antes llevaban, se les enseñó que debían
quitarse el ropaje de la vieja naturaleza, la cual está corrompida por los
deseos engañosos; ser renovados en la actitud de su mente; y ponerse el ropaje de la nueva naturaleza,
creada a imagen de Dios, en verdadera justicia y santidad." Efesios 4:22-24 (NVI).
¿Pensaremos, como dice Pablo, en "todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo
puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre" (Filipenses 4:8), permitiendo que nuestras mentes sean
transformadas? ¿O morderemos el anzuelo del enemigo y sus maquinaciones?
Y recuerda, estimado amigo, "no has sufrido ninguna
tentación que no sea común al género humano. Pero Dios es fiel, y no permitirá que seas tentado más allá de lo que puedas
aguantar. Más bien, cuando llegue la tentación, él te dará también una
salida a fin de que puedas resistir." 1 Corintios 10:13 (NVI)
"Pues aunque vivimos en el mundo, no libramos batallas
como lo hace el mundo. Las armas con que luchamos no son del mundo, sino que
tienen el poder divino para derribar fortalezas. Destruimos argumentos y toda
altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo."
2 Corintios 10:3-5
No basta resistir las mentiras del enemigo; debemos también, llenar nuestra mente con
la verdad de la Palabra de Dios. Jesús usó esta técnica cuando Satanás lo
tentó en el desierto (Mt 4.1-11). Respondió cada reto con las Sagradas
Escrituras, diciendo: "Escrito está..." Cuando tenemos un versículo
listo en nuestros labios que refute una mentira de Satanás, tenemos la munición
espiritual más poderosa posible.
No te castigues cuando fracases. Más bien, confiesa tu falta
y arrepiéntete lo más rápidamente posible ya que "si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los
perdonará y nos limpiará de toda maldad." 1 Juan 1.9 (NVI).
Comienza hoy, estimado amigo. No hagas promesas que
posiblemente no cumplirás y te llevaran a un sentimiento de culpa y decepción.
Simplemente comienza a llenar tu cabeza
con todo lo bueno, todo lo justo, todo lo puro...
"Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes la irá perfeccionando hasta el
día de Cristo Jesús". Filipenses 1.6 (NVI)
No hay comentarios:
Publicar un comentario