¿Cómo escaparemos
nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido
anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron.
Hebreos 2:3
Algunos bañistas jugaban, despreocupados, en un pequeño río en
la montaña. Justo a la orilla, en el lugar donde dejaron sus cosas, un cartel
muy visible indica en letras rojas: Prohibido bañarse.
Sin duda estos bañistas consideraron que esta prohibición era una tontería y que no había peligro. Por lo tanto no lo tuvieron en cuenta sin saber, o sin preocuparse quizás, que súbitamente el riachuelo puede aumentar mucho su caudal y arrastrar todo con la corriente.
La salvación que Dios ofrece también está escrita en rojo; en efecto, por medio de la sangre de Jesucristo vertida en la cruz, Dios perdona a los hombres sus pecados.
Pero al igual que esos bañistas, muchas personas menosprecian atrevidamente la advertencia de peligro y son indiferentes ante la cruz de Cristo. Consideran el sacrificio de Cristo como un hecho antiguo que nada tiene que ver con ellas. Sin embargo, Dios anuncia a todos los hombres que Jesucristo es el único camino a través del cual pueden escapar del juicio que merecen sus pecados. Menospreciar un peligro puede tener consecuencias fatales. Atender o no la advertencia sobre un peligro puede ser cuestión de vida o muerte. Tener en cuenta el mensaje de la cruz es un asunto vital que compromete el futuro eterno de cada uno.
Usted que lee esta hoja, escuche las advertencias de Dios. Él le advierte porque le ama. Dios invita a cada uno a arrepentirse. ¡Tenga en cuenta sus avisos!
Sin duda estos bañistas consideraron que esta prohibición era una tontería y que no había peligro. Por lo tanto no lo tuvieron en cuenta sin saber, o sin preocuparse quizás, que súbitamente el riachuelo puede aumentar mucho su caudal y arrastrar todo con la corriente.
La salvación que Dios ofrece también está escrita en rojo; en efecto, por medio de la sangre de Jesucristo vertida en la cruz, Dios perdona a los hombres sus pecados.
Pero al igual que esos bañistas, muchas personas menosprecian atrevidamente la advertencia de peligro y son indiferentes ante la cruz de Cristo. Consideran el sacrificio de Cristo como un hecho antiguo que nada tiene que ver con ellas. Sin embargo, Dios anuncia a todos los hombres que Jesucristo es el único camino a través del cual pueden escapar del juicio que merecen sus pecados. Menospreciar un peligro puede tener consecuencias fatales. Atender o no la advertencia sobre un peligro puede ser cuestión de vida o muerte. Tener en cuenta el mensaje de la cruz es un asunto vital que compromete el futuro eterno de cada uno.
Usted que lee esta hoja, escuche las advertencias de Dios. Él le advierte porque le ama. Dios invita a cada uno a arrepentirse. ¡Tenga en cuenta sus avisos!
© Editorial La Buena Semilla, 1166
PERROY (Suiza)
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