sábado, 6 de mayo de 2017

LA VIOLENCIA


Del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias.
Mateo 15:19
(Dios dijo:) Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros.
Ezequiel 36:26

Esta tarde observaba a dos hermanitos que jugaban en el jardín. La calma solo duró unos instantes, pues pronto empezaron a discutir y a pelear. El mayor recibió un golpe de su hermano, quien rápidamente se lo devolvió. Intervine y les pregunté qué sucedía. Las dos respuestas fueron idénticas: «¡Él me pegó!». ¿Cuál era la verdadera? Me fue imposible oírla, pues cada uno culpaba al otro.
Esta pequeña disputa entre niños casi nos haría sonreír si no fuera el reflejo de una violencia mucho más seria en el mundo de los adultos. La Biblia nos dice que la violencia marca las relaciones humanas desde el principio: Caín mató a su hermano Abel. Desde ese suceso, ¡cuánta violencia ha habido en el mundo! En efecto, el corazón humano es egoísta y pronto para actuar con maldad. ¿Podemos erradicar esta raíz de mal que hay en nosotros?
La Biblia dice: “Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? Yo el Señor” (Jeremías 17:9-10). El corazón del hombre no ha cambiado en el curso de las generaciones. La única solución para cambiar ese corazón tan duro es la que Dios, por amor, propone mediante su Hijo. Jesucristo da una vida nueva a aquellos que lo aceptan como Salvador; da un corazón nuevo en el que Dios derrama su amor mediante su Espíritu (Romanos 5:5).
¡Sí, con Jesús puedo tener una vida nueva, una vida marcada por la pureza y el amor!

© Editorial La Buena Semilla, 1166 PERROY (Suiza)

No hay comentarios: